Sudoku

"El juego es un tonto expediente, que hace creer a los necios que están haciendo algo muy inteligente cuando sólo están perdiendo el tiempo." George Bernard Shaw.

Como olvidar los juegos inventados en hojas de papel, donde tus únicas armas son un lápiz y tu ingenio. Desde los acrósticos, los anagramas, hasta llegar al inmortal crucigrama, en el mundo se han buscado miles de formas de entretener, ejercitar al cerebro con sencillos pasatiempos y de paso retándonos a encontrar soluciones.

En los primeros crucigramas se empleaban sólo palabras sencillas y definiciones primarias. Poco a poco se fueron complicando, y los creadores más hábiles perfeccionaron el arte de interrelacionar en los diagramas combinaciones más interesantes con el menor número posible de casillas negras. El uso de claves y la introducción de frases, nombres completos, títulos y otros recursos abrió nuevas posibilidades y permitió elaborar crucigramas cada vez más sofisticados, hasta tal punto, que ya existen diccionarios con las palabras de uso poco frecuente que figuran en este tipo de pasatiempos. Hasta llegar los viejos 1979, donde nacía un juego que fue reinventado 18 años después, en 1997 y que desde esos tiempos hasta ahora se ha convertido en una sensación para propios y extraños.

El sudoku es un crucigrama con números que no requiere habilidad matemática ni idiomática y si en el pasado muchos principiantes se han encontrado en los crucigramas con más de un dolor de cabeza, el sudoku es el llamado a reemplazarlo.

Lo primero que vez es un cuadriculado de nueve por nueve cuadritos. Al comienzo del juego, algunos pocos de estos llevan números del 1 al 9. Hay que llenar el resto con cifras sin repetir ni en fila ni en columna. Parece simple, y lo es si no fuera por los juegos que nos pone el cerebro y la vista al olvidar algunas reglas básicas. Un divertido pasatiempo para perder el tiempo, como dice Bernard Shaw.

Y para variar Wayne Gould, un amante de Sudoku y de paso programador de sistemas… se hizo un programita para hacer un numero infinito de “Sudoku’s” y los vende por 14.95 dólares. El crucigrama esta a punto de convertirlo en millonario. Sin dejar de lado los varios libros de Sudoku, como el “The Book of Sudoku” de Michael Mepham, que es un éxito editorial con más de 400.000 ejemplares vendidos.

Y por supuesto un amante de crucigramas, que hasta compra periódicos por solo el crucigrama se los aconseja.

“las palabras cruzadas son para los artífices del idioma, y el sudoku para el resto de nosotros”

La imagen: Papel Higiénico Sudoku.
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