Donar Sangre: entre decepciones y el deber cumplido

Ante la gran decepción de no tener sangre azul corriendo por mis venas, y el hecho de haber vivido engañado 24 años de mi vida con esa teoría...=) me dispuse a donar sangre.
...Quizá sea la agresiva campaña de "sangre segura" que se dan por los medios últimamente, o tal vez mi sentido humanitario de ver por mis ojos realidades con las que quizá no me topo diariamente, pero había llegado al centro de donación de sangre, con mis temores de tremendas agujas succionadoras de sangre, enormes aparatos que servirían para el cometido, etc... pero me encontré con personas gentiles, unas cuantas preguntas, una picason imperceptible y una cerveza sin alcohol de cortesia...
Bueno, luego de la "succión de sangre" de mis venas, un aire de deber cumplido llego a mi ser, el hecho de que un poco de uno mismo pueda ayudar a varias personas es algo para sentirse orgulloso y como decia en el cartel "HAY MUCHAS MANERAS DE SALVAR VIDAS... UNA DE ELLAS CORRE POR TUS VENAS".