Leonard Cohen: The Future - El Futuro
Cohen es el depresivo, no químico, más poderoso del mundo
Ive seen the future brother, is murder
Si San Juan hubiera podido cantar los delirios de su Apocalipsis, de seguro hubieran sido con aquella voz ronca de Cohen. Pero claro, con seguridad Cohen no se inspiró en el Apocalipsis para escribir esta canción (el no cree en esas cosas), y tampoco nos dio mensajes codificados para leerlos a nuestro antojo.
El Cohen del futuro es cínico, no es el Cohen de Songs of Leonard Cohen (1968) de voz amable y una inocencia implícita, ha envejecido, su voz parece quebrada y es un cascarrabias fatalista que le canta a la tragedia y la depresión y Future (1992) es uno de sus evangelios plagado de esas visiones.
En 1992, tras una desconcertante relación con la actriz Rebecca de Mornay, Leonard Cohen se recluyó en un monasterio de monjes Zen cerca de Los Ángeles. Por entonces, salió al mercado The future, una obra de redentora belleza alquímica que mezcla lo melancólico y lo perturbador, en la que todos los miserables poetastros aparecen intentando sonar como Charlie Manson, en la que la sabiduría de Johnny Walker es generosa, en la que el violinista toca cosas tan sublimes que las mujeres se arrancan las blusas y los hombres bailan sobre telas de lunares, en la que la nueva tecnología instrumental y la nueva voz ronca se mezclan con suspiros, gritos y besos hambrientos.
En The future regresamos al ropaje depresivo, al desasosiego y a la certeza de que el amor es el único salvavidas que nos queda, por eso siempre estamos esperando el milagro (He estado esperando tanto tiempo tu beso, esperando que pasara algo así), aunque todos sabemos que nunca llegará (No quiero que el amor vuelva a hacerme daño: así que no me des el mundo hoy y me lo quites mañana, no me hagas eso, cariño). La particular visión de Leonard Cohen acerca del futuro se resume en la máxima filosófica que protagoniza el disco: Devuélveme el muro de Berlín, dame Stalin y San Pablo, dame Cristo o Hiroshima, he visto el futuro, hermano, y es un crimen. El pesimismo existencialista desgarra un mundo en el que parece que todo está oscuro y nieva continuamente: el río ha empezado a helarse y estoy harto de fingir. Estoy roto de inclinarme. He vivido demasiado tiempo de rodillas. Desde el principio, The future se convirtió en una piedra preciosa capaz de devolvernos nuestras noches rotas, de llenar nuestras habitaciones de espejos, de susurrarnos al oído nuestras vidas secretas.
En The Future su visión futurista no pudo ser más acertada y lista para ser publicitada por cualquier compañía de cómputo. Degradación, Guerra, lujuria, violencia, hambre, peste y muerte. No cabe duda que Cohen no se equivoca y en una época que podemos digerir casi cualquier profecía de un fin del mundo posible y un futuro imperfecto, Cohen es el mas cercano profeta que nos muestra nuestro presente con hermosos coros.
En Audio: Leonard Cohen - The Future.
Leonard Cohen: The Future - El Futuro
Devuélveme mi noche rota,
mi habitación de espejos, mi vida secreta;
Esto es muy solitario, no queda nadie a quien torturar.
Dame control absoluto sobre todos los seres vivos,
y acuéstate a mi lado, nena, ¡es una orden!
Dame crack y sexo anal,
coge el único árbol que queda
y mételo en el agujero de tu cultura.
Devuélveme el Muro de Berlín,
dame Stalin y San Pablo.
He visto el futuro, hermano: es un crimen.
Las cosas van a deslizarse en todas direcciones,
no habrá nada, nada que puedas volver a medir.
La ventisca del mundo ha cruzado el umbral
y ha volcado la orden del alma.
Cuando dijeron: Arrepiéntete,
me pregunto a qué se referían.
No tienes la más remota idea de mí,
nunca la tendrás, nunca la tuviste.
Soy el pequeño judío que escribió la Biblia.
He visto las naciones levantarse y caer,
he oído sus historias, las he oído todas,
pero el amor es el único motor de supervivencia.
Aquí tu siervo ha sido ordenado,
decirlo claro, decirlo fríamente:
Se ha acabado, fin de trayecto.
Y ahora que las ruedas del cielo se han detenido,
sientes la fusta del diablo.
Prepárate para el futuro: es un crimen.
El antiguo código occidental saltará en pedazos.
De pronto, estallará tu vida privada.
Habrás fantasmas, habrá fuegos en la carretera,
y el hombre blanco bailando.
Verás a tu mujer colgada boca abajo,
su vestido cubriéndole el rostro,
y todos los miserables poetuchos
aparecerán, intentando sonar a Charlie Manson.
Devuélveme el Muro de Berlín,
dame Stalin y San Pablo,
Dame Cristo o dame Hisroshima.
Destruye otro feto ahora mismo;
no nos gustan los niños.
He visto el futuro, nena: es un crimen.
Las cosas van a deslizarse en todas direcciones,
no habrá nada, nada que puedas volver a medir.
La ventisca del mundo ha cruzado el umbral
y ha volcado la orden del alma.
Cuando dijeron: Arrepiéntete,
me pregunto a qué se referían.
En Video: Leonard Cohen The Future (Live in London).
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