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Simón Bolívar: A 221 años del nacimiento del mas grande libertador de la historia

Simón Bolívar: A 221 años del nacimiento del mas grande libertador de la historia Un resumen del Libertador mas grande de la historia, del hombre que vivió entre revoluciones, victorias, ingratitudes, abandonos, tristeza, desengaños y que aun en su lecho de muerte soñó con la libertad: "...mis enemigos han hollado lo que me es mas sagrado: la reputación de mi amor a la libertad. He sido víctima de mis perseguidores que me han conducido a las puertas del sepulcro. Yo los perdono. Colombianos: al desaparecer de en medio de vosotros, mi cariño me dice que debo hacer la manifestación de mis últimos deseos. Mis postreros votos son por la felicidad de la Patria... Si mi muerte contribuye a que cesen los partidos y se consolide la unión, yo bajare tranquilo al sepulcro...".
Una muerte que no le alivio de sus pesares porque ni aún siquiera después de su muerte encuentra el reposo. Y hoy desde el pedestal, en que su epopeya lo ha colocado, de poder hacerlo, observaría con horror lo que en su nombre se hace en ésta, su América: cada día más dividida, cada día más pobre, cada día más débil...


Bolívar: El Hombre.
Simón José Antonio de la Santísima Trinidad Bolívar Palacios Ponte Blanco nace el 24 de julio de 1783 en Caracas, de noble familia española, murió en Santa Marta, Colombia el 17 de Diciembre de 1830. Fue el Primer Presidente Vitalicio de la República Bolívar del 6 de Agosto de 1825 al 2 de Enero de 1826.
A su retorno a Venezuela, el año 1810 y cuando ya se había iniciado la lucha contra la dominación española, tomó parte activa a favor de la causa de la Independencia. En el breve lapso de tres meses libró más de quince combates con los españoles a los que finalmente derrotó en Carabobo (Colombia) y Pichincha (Ecuador). Estas victorias le consagraron con el título de Libertador, logró la Independencia de Venezuela, Colombia y Ecuador. Derrotados los realistas en los campos de Quina (Perú), selló para siempre la independencia de Alto Perú y Bajo Perú. El Bajo Perú nombró su protector, el Alto Perú, tomó su nombre llamándose República de Bolívar, luego Bolivia, la hija predilecta del Libertador.

El Juramento:
En 1804 vuelve a ver en París a su antiguo maestro Simón Rodríguez, quien ahora se llama Samuel Robinson. Luego Viaja a Italia Acompañado de Robinson y de Fernando Rodríguez del Toro; el 15 de agosto de 1805 en la cumbre del Monte Sacro, junto a sus compañeros de viaje, Bolívar pronuncia su famoso juramento: "... No daré descanso a mi brazo ni reposo a mi alma hasta que haya roto las cadenas que nos oprimen por voluntad del poder español". Este es el punto más importante de nuestra investigación acerca de su vida personal, pues justo aquí culmina el periodo en el que es simplemente un hombre para convertirse en el hombre. Es este momento en el que toma la determinación de dejar su nombre en la historia; es justo este momento en que todo lo que ha aprendido, todo lo que ha sufrido, todo lo que ha sentido se une con lo sublime del instante, para pasar de pensamiento a palabra y acción. La voluntad estaba en él, era sólo cuestión de tiempo que para que se presentara la oportunidad adecuada.

Influencia inmediata de Bolívar:
El momento indicado no se hizo esperar, fue a los pocos años, con una Latinoamérica necesitada de un líder, de una voz de mando, de alguien que les dijera que hacer y como hacerlo.
Fue allí cuando las ideas independentistas - que no eran nada nuevo en aquellos días - se fortalecieron con una voz joven dispuesta a todo por liberar a su América, esa voz fue la de un criollo con grandes recursos, una gran inteligencia y conocimientos del arte militar, esa voz fue la de Simón Bolívar.
El éxito de Bolívar no fue inmediato ni instantáneo, pero una vez conseguido fue total. Y todo se debió a la necesidad del pueblo de un líder, pues en aquellos días había caudillos y militares, sin embargo no había ejercito. Todo lo que había era un puñado de americanos que buscaban la libertad, más tarde y gracias a Bolívar y a su vocación de líder esos americanos se convirtieron en un ejército, un ejército que estaba convencido de su poderío y que estaba seguro de su victoria.
Pero ¿qué hizo Bolívar para crear este ejército? Como señalamos al terminar el primer capítulo, los criollos buscaron crear una nueva forma de pensar y de vivir basándose en los principios de libertad, igualdad y fraternidad provenientes de Francia y el principio del nacionalismo proveniente de Norteamérica, pero aún no encontraban la forma de hacerlos florecer. Igualmente el resto del pueblo americano, asustado del poder de España y deseoso de acabar este dominio, también hizo una peregrinación en busca de una identidad.
El problema radica en que esa identidad no viene sola, esa identidad se define a través del tiempo y las experiencias, y el primer paso para conseguirla es separándose de las cadenas que nos unen a una identidad ajena. Y eso fue en primera instancia lo que propuso Bolívar: Libertad para empezar una nueva era. Esas palabras de Bolívar llegaron apenas a tiempo para un pueblo que estaba sediento de nuevas ideas, y el pueblo lo escuchó no porque fuera mejor que otros, sino porque fue el único con la inteligencia y el valor para hacerlo.
Es cuando logra su primera victoria: hacer que América lo escuche. Años después alcanzaría su segunda victoria: liberar a América. Y más tarde emprendería su tercera cruzada, una que no logró en vida: unir a América bajo una sola bandera.

Legado cultural de Bolívar
Unir a América bajo una sola bandera, ese fue su sueño, fue su principal intención desde el día que juró en Monte Sacro liberarnos. Sin embargo no pudo hacerlo, no en la manera que él lo quería.
Su idea de unir a América no era sólo la de crear una liga de países que se ayudaran mutuamente. Su idea era la de crear una nación tan poderosa, como cualquier nación europea; Bolívar quería un país próspero, en el que la educación seria ejemplar, en el que cada uno podría vivir bajo una democracia real, en el que no existirían dictadores, ni hacendados a costa de la pobreza de otros, una nación en donde podríamos forjar nuestra identidad con tiempo y experiencia.
Este fue el sueño real de Bolívar, un sueño muy adelantado para su tiempo. Pero a pesar de que su sueño no fue cumplido tenemos algo que se acerca mucho al ideal bolivariano y que de vez en cuando nos reconforta: una liga de países americanos, la OEA.
Pero ¿porqué el ideal bolivariano no dio frutos? Pues porque cuando logró lo que el resto de los criollos no pudieron - liberarse del yugo español -, estos últimos se encargaron de cambiar su plan utópico por uno en el que ellos serían los protagonistas, uno en donde ellos podían aprovechar más de varios gobiernos corruptos que de uno ejemplar.
Al final de todo esto; hay sólo una pregunta recurrente en nuestro pensamiento: ¿qué hubiese sucedido si el sueño bolivariano se hubiese cumplido? Seguiría Latinoamérica siendo pobre o pertenecería al primer mundo. Imagine usted lector las posibilidades.
Pero la historia se pone aún más triste cuando vemos que nuestros vecinos europeos están a punto de finalizar el proyecto de la Unión Europea de Naciones. Una liga de países, todos del mismo continente, que compartirán una moneda común y un mercado común. ¿Porqué nosotros no hemos escuchado la voz de un coterráneo? ¿Porqué tenemos la solución en nuestra propia cara y la ignoramos?
La idea de Bolívar sigue teniendo vigencia hoy en día y la seguirá teniendo por mucho tiempo, prueba viva de eso es la antes mencionada Comunidad de Naciones Europea y los mercados internacionales que se están abriendo en todo el mundo. El sueño de Bolívar existe, somos nosotros los que hemos fracasado no haciéndolo realidad.
Que más nos queda que disfrutar el patético sabor dulce de la victoria sobre España. Claro, sin contar con la amargura de los sueños no cumplidos y de la tarea no terminada, Bolívar hizo su parte, ahora nos toca a nosotros terminar su peregrinar.

EN HOMENAJE AL HITO, A EL HOMBRE HISTORIA, AL LIBERTADOR SIMON BOLIVAR
GLORIA Y HONOR A LA MEMORIA DEL GRAN LIBERTADOR

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